HIJOS DE LA LUNA

Las lunáticas mujeres, espectrales, porque nos niegan el ser y estar plenamente con nuestros hijos, las hijas de la noche habitantes del satélite, en la sombra, moradoras, donde el astro rey todo lo ilumina y nos recluye al espacio de los sueños. Estas lunáticas en la obscuridad que fuimos embestidas a ser desterradas, donde giramos en este espacio lunar y femenino, a todo el firmamento gritamos el arrebatamiento de nuestros hijos por la sinrazón de todos aquellos avariciosos unos de poder, otros de maldad.

Qué gran post has realizado, lilith.
Si lo lee maria-luz seguro que le parecerá mas que perfecto.
Luna, que somos todas nosotras: aquellas a quienes nos han arrebatado a nuestras hijas e hijos y aquellas que viven en la continua angustia de perderlos, iluminamos cada noche el firmamento oscuro que nos envuelve, velamos el sueño de nuestras hijas e hijos y menguamos cuando cualquiera de nosotras necesitamos ser acunadas.
No hay luz mas infinita, no hay amor mas grande
Un gran abrazo lilith y no cambies nunca.

Por alusiones:
Ciertamente, todos somos hijos de la luna, y enlazando con el centenario del nacimiento del POETA; Miguel Hernández, un hijo al que el padre incluso pegaba al chico si lo encontraba leyendo.
Algunas de nosotras, sino todas, lo que le gusta a su madre, hay que borrarlo, anularlo y bilipendiar, en los hijos.
Ya se encargarán si no son ellos directamente, con sus súbditos (las fuerzas económicamente recompensadas)
Los hijos de la luz y de la sombra, metidos en los pozos, empozoñados, y con la agonía de su madre a cuestas.
Caudalosas mujeres, que apenas sin aliento, brotan de toda la geografía, para que no atropellen más anhelos, más vidas derribadas.
El hijo está en la sombra: de la sombra ha surtido,
y a su origen infunden los astros una siembra,
un zumo lácteo, un flujo de cálido latido,
que ha de obligar sus huesos al sueño y a la hembra.